En una de mis visitas al dermatólogo me habló de los beneficios de la arcilla verde para la piel grasa :
- Antiséptica y desinfectante: Absorbe las impurezas depurando las capas más profundas de la piel. Además ayuda a estimular la limpieza linfática.
- Antibacteriana: Impide el desarrollo de las baterías.
- Antiinflamatoria y regenerativa: Reduce la inflamación y el dolor. También regenera la piel y ayuda a cicatrizar.
Con tantas propiedades decidí probar. También me comentó que antes de aplicar la mascarilla exprimiera un poco de limón ya que de está manera se abrían los poros y se reblandecian los puntos negros y blancos, así que me decidí a probarlo.
MASCARILLA: INGREDIENTES
- 1/3 de limón exprimido.
- Una cucharada de arcilla verde (La podéis encontrar en un herbolario).
- 1/3 de agua.
- Cuenco y espátula de madera para mezclar (en el paquete de arcilla pone que no es recomendable utilizar metal porque pierde las propiedades).
- Brochas pequeñas para aplicar el zumo de limón y la mascarillas.
PASOS
- Aplicar el limón exprimido en el rostro (yo utilizo una brocha fina) y dejarlo actuar entre 2 y 3 minutos.
- Mezcla la arcilla verde con el agua y hacer una pasta. Recomiendo echar primero la arcilla e ir introduciendo poco a poco el agua para que no quede muy líquida.
- Aplicarla, en este caso también utilizo una brocha, y dejar actuar 15 minutos.
OPINIÓN Y RESULTADOS
Desde la primera vez que la probé noté la piel más lisa y con menos impurezas sobretodo en la nariz. También los brillos se reducieron significativamente.
A la semana la volví a probar ya que me habían salido unos granitos y el resultado fue igual e incluso mejor ya que al día siguiente los granitos habían desaparecido prácticamente.
Ahora llevo bastante tiempo utilizándola y me encanta, tengo la piel más lisa, con menos brillos, casi sin granitos y las cicatrices las reduce bastante rápido. Definitivamente recomiendo esta mascarilla.